Bálsamo curativo utilizado por los espiritualistas de la corriente roquista, que consiste en agua del pozo de Samaria en Atizapán de Zaragoza, Estado de México, y del río Jordán (posibles renombramientos religiosos) que pasa por los pueblos hidalguenses de San Miguel Regla y Huasca (1) (V. espiritualismo).
(1) Ortiz Echániz, S., 1990.