Fragmentos de huesos, colmillos o muelas de mamut o mastodonte prehistórico. Se cree que el polvo, resultado de pulverizar estos fragmentos fósiles, posee propiedades mágicas y medicinales. Por ejemplo, el cocimiento de huesos de gigante se administra a los bajos de estatura y a los enanos para estimular su crecimiento, y a las embarazadas con el fin de calcificarlas e influir en el desarrollo del feto (1). Los vendedores de productos medicinales populares del Distrito Federal recomiendan la infusión hecha con el polvo de estos huesos para aliviar el susto (2), mientras que en Tecospa, Estado de México, se recomienda hacer frotaciones con una mezcla de hierbas y huesos molidos para tratar el aire de noche (3).
(1) Padrón Puyou, F., 1956.(2) Barajas Casso-López, E., 1951.(3) Madsen, W., 1960.