Biblioteca Digital de la Medicina Tradicional Mexicana
Universidad Nacional Autónoma de México
Diccionario Enciclopédico de la Medicina Tradicional Mexicana
Mezquinos

Sinónimo(s): lunares abultados (1), verrugas (Hgo)(2) (Edo Mex)(3) (Mor) (4) (Tab) (5) (Yuc) (6) Lengua indígena: Náhuatl tzotzocatl (7), tzutzucate (8).

Lesión de la piel en la que aparecen verrugas o granos de consistencia esponjosa, principalmente en el dorso de las manos, dedos y rodillas.

Generalmente se relaciona la aparición de los mezquinos con el egoísmo, la avaricia y la ambición (3) (7), aunque también se registran otras interpretaciones acerca de su etiología. En los Altos de Chiapas se cree que se deben al temor que siente una persona de ser contagiada por otra que los padece (8). Entre los tzotziles, se dice que es una herencia dejada a los hombres por Jesucristo que tuvo muchos de ellos cuando vivió en la Tierra (9). Los mazahuas consideran que tienen como causa a la envidia o a un daño provocado por un tercero (10). En varias partes del país, se piensa que aparecen en los dedos al señalar el arco iris (l y 2).

Los tratamientos son variados y tienen como finalidad cauterizar o "secar" el mezquino; para ello lo frotan con diferentes especies vegetales, como cascara de plátano macho (Musa sp.) (8), hojas de hediondilla (Cestrum nocturnum) y altamisa (Ambrosia artemisiifolia) (11), o se aplica localmente la savia de la taratana (Cassia alata) o de la cebolla morada (?), punzando el mezquino previamente con una espina de limón (Citrus sp.) (5); igualmente, se recomienda frotar las zonas afectadas con sal o cal (3) (10). Son también numerosos los procedimientos de tipo mágico en que las lesiones del enfermo le son trasferidas a otra persona como condición para su cura; se citan a continuación dos ejemplos: en varias entidades se asegura que una persona se contagia si cuenta los mezquinos de aquel que los padece. En los Altos de Chiapas se aconseja que la persona enferma camine por la banqueta al mismo tiempo que frota las lesiones con una moneda de cobre; una vez hecho lo anterior, debe envolver la moneda en un papel y, sin voltear, arrojar por arriba de su hombro el paquete; la persona que lo encuentra y lo recoge se contagia de los mezquinos, y el enfermo sana (8).

Resulta interesante conocer las ideas de los antiguos nahuas con respecto a este tipo de verrugas, para cuyo tratamiento se utilizaba el tzontzoncaxihuitl o hierba verrugosa (?) (12). López Austin señala que en el náhuatl del siglo XVI, los mezquinos eran nombrados tzotzocatl, término que también recibía el avaro. Cabe indicar que en los Altos de Chiapas actualmente se utiliza la expresión tzutzucate como sinónimo de mezquino (8), evidente deformación del término náhuatl señalado por López Austin. "No hay informes -dice el mismo autor-de una creencia antigua acerca de la relación entre verrugas y avaro, aunque sí se sabe que, según las ideas prehispánicas, los estados anímicos tenían efecto físico muy notable en el cuerpo humano" (7:33). En relación con lo anterior, Madsen encontró que entre los actuales nahuas del Estado de México, los mezquinos son considerados de naturaleza fría y causados por sentimientos egoístas. De esta manera, aquellos que los padecen desean quitárselos para evitar que sea reconocida públicamente su condición (3).

Para la medicina académica, los mezquinos corresponden a las verrugas vulgares. Clínicamente son tumoraciones benignas, indoloras, de evolución crónica y autoinoculables. El tratamiento utilizado por los dermatólogos no provoca problemas colaterales en el paciente y coincide, de alguna manera, con los utilizados en la medicina tradicional anteriormente descritos, en los que la psicoterapia proporciona excelentes resultados, ya que el especialista administra un placebo procurando que el paciente lo tome bajo ciertas especificaciones. Al mismo tiempo, los profesionales advierten que los remedios populares hechos con cáusticos producen cicatrices visibles, peores que las verrugas y de difícil curación (13).

Índice de Autores

(1) Padrón Puyou, F., 1956.

(2) Guerrero Guerrero, R., 1983.

(3) Madsen, W., 1960.

(4) Zolla, C. et al., 1990.

(5) Garcés Medina, A. R., 1989.

(6) Rivera, M. O., 1976.

(7) López Austin, A., 1990a.

(8) Moscoso Pastrana, P., 1981.

(9) Holland, W. R., 1978.

(11) Ruiz Salazar, C. L, 1989.

(10) Gómez López, J. M., 1990.

(12) Viesca Treviño, C., 1986a.

(13) Saúl, A., 1974.

AT