Biblioteca Digital de la Medicina Tradicional Mexicana
Universidad Nacional Autónoma de México
Diccionario Enciclopédico de la Medicina Tradicional Mexicana
Quemada

Lengua indígena: Náhuatl (Pue) netlatili(1), xoquía (2), chuquía (3). Totonaco (Pue) chi-chinit (3).

Enfermedad observada en niños y adultos, cuya causa principal está asociada al particular estado del cuerpo de la mujer en el momento del parto, o durante el puerperio.

Los nahuas de San Luis Potosí creen que se origina por una riña o discusión dentro de una familia donde recientemente ha habido un parto; por ser de calidad caliente, la enfermedad afecta a la puérpera y a las personas que participaron en el conflicto (1) (V. frío-calor).

En Puebla se reportan diferentes causas y momentos en los que se presenta: los nahuas de Atla la atribuyen a las emanaciones "malsanas" -a las que nombran xoquía- presentes durante el parto de un humano o de un animal, o a que durante el nacimiento el niño haya ingerido sangre de su madre accidentalmente (2). Los totonacos de Zapotitlán de Méndez consideran que al recibir al niño, la partera le transmite las emanaciones dañinas de la madre, o bien ésta lo afecta durante el puerperio con los efluvios enfermantes presentes en la sangre y en los olores que expulsa; se dice entonces que el niño "se quema" porque en esos momentos la sangre de su madre es "fuerte y mala". En Yancuictlalpan, los nahuas creen que los hombres que tienen relaciones sexuales con su esposa durante el puerperio también son afectados, ya que la mujer está "sucia" y transmite bajo este estado su "mal humor" al marido, quien a su vez es criticado por no respetar el proceso de recuperación de su cónyuge (3).

La sintomatología varia de acuerdo con la edad: en los niños hay falta de apetito, adelgazamiento, fiebre, diarrea, llanto, dificultad para respirar e hinchazón general (3). En los adultos, aparecen manchas "cenizas" y la piel se torna amarillenta, hay falta de apetito, adelgazamiento, "desgano" y repulsión al agua (1) (3).

Los tratamientos pueden ser variados, destacando los baños preparados con diversas materias: los nahuas de San Luis Potosí aconsejan tomar agua de chote (Parmentiera edulis) y bañarse con el agua del charco en que se revuelcan los puercos (1). En Atla recomiendan al paciente que ha sido afectado por el xoquía de un animal, comer carne de zorrillo (Mephitis sp.) y bañarse con el caldo del mismo, y en caso de haber sido originado por el de una mujer, tomar un té de hoja santa (Piper auritum); la ingesta de miel de enjambre restablece la salud del recién nacido que bebió sangre de su madre (2). Por su parte, los totonacos de Zapotitlán y los nahuas de Yancuictlalpan bañan al enfermo con la decocción de omequelite(?), saúco (Sambucus mexicana) y zoapatle (Montanoa tomentosa) además de prepararle un té de manzanilla (Matricaria recutita) (3).

Índice de Autores

(1) Reyes Antonio, A., 1982.

(2) Montoya Briones, J. de J., 1964.

(3) Cuerno Clavel, L. E. et al., 1989.

AT