La "hinchazón de cuerpo" es otro de los padecimientos considerados de origen maligno, poco claro, designados con el término de poslom (V. demonio). Los terapeutas estiman que esta enfermedad aparece después de haber tenido un sueño en el que el sujeto afectado se ve consumiendo alguna comida ofrecida por otra persona, o bien en el que es tocado por alguna persona anciana.
Cuando un sujeto contrae este mal se le empieza a hinchar todo el cuerpo de manera progresiva y en ciertas zonas "le brota agua"; su rostro se toma blancuzco pero el resto de la piel adquiere una coloración rojiza; le brotan granos por todas partes y siente un intenso ardor en el estómago, sobre todo cuando consume alimentos picantes. Toda esta situación sumerge al enfermo en un intenso estado de depresión, si se trata de un adulto, o le provoca un llanto continuo, si el afectado es un niño.
El diagnóstico se establece a través de las características del pulso del paciente. El terapeuta le toma el pulso en los dos brazos mientras lo interroga acerca de su estado (V. pulsar). También le revisa todo el cuerpo para corroborar la inflamación.
Para el tratamiento de la hinchazón de cuerpo los curanderos choles emplean las plantas silvestres llamadas tzuam pimel, pactio, tie tie coac, bancrispimel, culumtia pimimel, shuchucpimel y pinpinpimel. Todas ellas se remojan en agua durante algunas horas; el líquido resultante se debe ingerir como agua de tiempo, y también se debe emplear para hacer un baño. Este tratamiento incluye una limpia con ramas, que el curandero ejecuta mientras recita un salmo, al finalizar le rocía aguardiente.
La hinchazón de cuerpo es una enfermedad propia de la población adulta de las comunidades. Los terapeutas advierten a sus pacientes sobre la necesidad de estar atentos a su aparición ya que una atención tardía del enfermo puede provocar su muerte.