La envidia es una causa de demanda de atención que atienden los médicos tradicionales huastecos. Se produce como consecuencia de conflictos interpersonales entre los habitantes de las comunidades, problemas que generalmente dan origen a rencores, enojos y "envidias". Una situación como ésta puede inducir a una persona a decidir, por ejemplo, "echar una basura a otra, la cual se le clava en la garganta, en un brazo o en un pie", afirman los terapeutas (V. tlazol). La envidia no siempre da origen a un daño físico del afectado; muchas veces sólo se hace para lograr "alejar vecinos o atraer esposos".
Los síntomas que presenta el enfermo aparecen en forma inexplicable, y dependen del tipo de daño de que ha sido objeto. Así, si le han "echado una basura" que se ha clavado en su cabeza, por ejemplo, comienza a sentir punzadas en ella, y rigidez en el cuello. Si el mal está instalado en el estómago, los síntomas aparecen en este órgano.
El procedimiento diagnóstico para determinar la naturaleza de la envidia es la adivinación, que el terapeuta lleva a cabo mediante "la claridad" del sol, del agua o del aire, elementos que son visualizados como un espejo en el que se reflejan las causas del mal (V. alixtalaab)
El tratamiento para curar al enfermo de envidia consiste en la administración de un té elaborado con tronadora, cal y sal de mesa, dos veces al día. Los médicos tradicionales afirman que, por lo general, esta terapia se debe hacer por un periodo de tiempo prolongado para lograr que el paciente comience a mostrar signos de mejoría. Si el mal comprende dolores en la región estomacal, el tratamiento incluye la aplicación de emplastos de hojas de higuerilla y albahaca en el área dolorida.
Aunque el efecto del tratamiento tarda en manifestarse, los terapeutas recomiendan buscar la ayuda de un médico tradicional en cuanto el enfermo sospecha que ha sido víctima de la envidia de un tercero, ya que si demora en recibir la terapia adecuada, los síntomas de la enfermedad progresan, comienza a hincharse gradualmente y el "mal le revienta", produciéndole dolores insoportables, que finalmente lo conducen a la muerte.