El mal de los ojos o irritación de la vista es una de las afecciones de los ojos frecuentes entre la población chontal, que atienden los curanderos y las parteras del grupo. Afecta indistintamente a personas de cualquier edad y sexo.
La afección es causada por "una basurita" que entra al ojo y que lo irrita. Según testimonios de los informantes, "los ojos se ponen rojos y arden; también se siente que una basura estorba en el ojo". Los tratamientos son variados y comprenden unciones con pomadas curativas, o lavados de los ojos con ciertos preparados medicinales. Una de las pomadas utilizadas se prepara poniendo a cocer, en vaselina, los tallos y hojas de la hierba del conejo; con ella "se untan las orillas de los ojos", una vez al día; generalmente, al cabo del sexto día las molestias ceden. Si no ocurre así, se debe continuar con el tratamiento hasta que los ojos sanen. Durante la cura se aconseja seguir una dieta particular: los informantes recomiendan evitar el consumo de café caliente, chile y sal. Los lavados oculares se hacen con un té preparado con hinojo, rosa blanca, rosa de Castilla y manzanilla, y se aplican, tres veces al día, con ayuda de un gotero o de un lavaojos; el hinojo se puede reemplazar por frijol de rosita. También se puede utilizar el preparado de nombre "dedito de dios", del que se coloca una gota en cada ojo.
Para prevenir esta dolencia se aconseja evitar los aires, de manera que no entre en los ojos ningún objeto extraño.