Biblioteca Digital de la Medicina Tradicional Mexicana
Universidad Nacional Autónoma de México
Atlas de las Plantas de la Medicina Tradicional Mexicana
Guamúchil
Pithecellobium dulce (Roxb.) Benth. — Leguminosae


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Soledad Mata

Sinonimia popular.

Guamúchil amargo, guamuchil dulce, guamuchil hogadizo, guamuchilo, huamuchil, palo de guamoche, pinzan. Guerrero: tichi coo bíchí, tíchí coo yatu (mixteco); Hidalgo: humu, umu; Oaxaca: piil (huave), íson te cho (amuzgo); Quintana Roo: chucum blanco (maya-español), piliil, sakchucwm, tsiuche, ts´itsínche, ts´uyche (maya); San Luis Potosí: jumo, jumu (tenek).

Botánica y ecología.

Árbol de 15 a 20m de altura, tiene el tronco grueso, con madera blanca, corteza delgada y ramas espinosas. Sus hojas están divididas, agrupadas en 4 hojitas. Las flores son bolitas amarillentas, verdosas o rosadas y están reunidas en racimos. Los frutos son vainas verdes y rojizas cuando maduras, están retorcidas y presentan angostamientos a todo lo largo del fruto; las semillas son redondas, negras y brillosas, están rodeadas por una franja blanca rojiza (arilo).

Originario de América tropical. Habita en climas cálido, semicálido y templado, desde el nivel del mar hasta los 1500m. Planta silvestre presente en zonas perturbadas o poco alteradas de bosques tropicales caducifolio, subcaducifolio, subperennifolio y perennifolio, matorral xerófilo, bosque espinoso, bosque mesófilo de montaña, bosques de encino y de pino.

Etnobotánica y antropología.

Pithecellobium dulce es recomendado en el tratamiento de trastornos digestivos como dolor estomacal, disentería, estreñimiento, indigestión, molestias estomacales en general, así como para proteger el estómago e intestinos. Sin embargo, se utiliza principalmente contra la diarrea, administrando una decocción de la corteza que se toma tres veces al día. A este cocimiento se le puede agregar la raíz del tepehuaje (Lysiloma acapulcensis), cogollo de ahuilote (Vitex mollis), más el de quebraplato (Solanum nigrum), y se toma el té, también tres veces al día.

Con frecuencia es utilizado en casos de empacho, causado por ingerir alimentos descompuestos, se caracteriza por la presencia de dolor de estómago, diarrea muy fuerte y calentura, para combatirlo se prepara un té con la semilla de aguacate (Persea americana), corteza de pinzán, flor de changungo (Byrsonima crassifolia), tecata de ciruelo (Spondias mombin), brotes de guayabo (Psidium guajava), se toma en ayunas y luego soban la espalda y el estómago del paciente; o bien, es usado el cocimiento de raíz de huizache (Acacia farnesiana), con la de tuna (Opuntia ficus-indica), la de hierbabuena (Mentha piperita), la de orégano (Origanum vulgare) y semilla de cubano (Swietenia humilis), aparte se quema un pedazo de adobe y ya que esté al rojo vivo se le agrega al agua donde se cocieron las plantas, se ingiere en ayunas; también puede ocuparse el cocimiento con las ramas de tronadora (Tecoma stans) o el cocimiento de la corteza sola.

Para el empacho, los amuzgos de Oaxaca usan el palo de guamoche; cortan un pedazo de la corteza del árbol y lo mezclan con las cortezas de otros como el cuatolote y el tamalocote (sp. n/r.); lo hierven bien para tomarlo calientito en ayunas.

La cáscara de guamúchil hervida con la de palo y de sangregado, se recomienda para lavar las heridas o en cocimiento con las hojas de zempasuchitl, las de albahacar y la cáscara de copal (spp. n/r), esto se ocupa para baños en todo el cuerpo, cuando hay frialdad.

Se recomienda poner de 2 a 3 gotas de savia por la mañana para la nube en el ojo.

También se utiliza para evitar el aborto, en golpes, llagas, sinusitis, granos en la parte del hombre que pasa a la mujer (V. purgación). Se le reporta como astringente y antiinflamatorio.

Historia.

Francisco Hernández, en el siglo XVI la refiere como: astringente, contiene las disenterías y los demás flujos. Además, instilado en la nariz evacua abundantemente los humores acuosos de la cabeza. Saca los gusanos de las úlceras internas. Quita el dolor de los dientes y sana las úlceras incurables, combate los venenos y calma los dolores de oídos.

La Sociedad Mexicana de Historia Natural, en el siglo XIX menciona su uso como: antidisentérico, astringente, epizootias de gallinas, eupéptico y flujos.

En el siglo XX, Maximino Martínez la consigna como: antiabortivo, antidisentérico, antídoto, antiemético, antiodontálgico, antiparasitario, astringente, catártico, eupéptico, flujos, humores acuosos de la cabeza y otalgia. Finalmente, la Sociedad Farmacéutica de México señala su uso como: astringente, y expulsa los gusanos del interior de las úlceras.

Química.

En las hojas se han identificado los flavonoides afzelín, ramnósido de camferol, quercitrín, camferol y quercetín. Los dos últimos compuestos también se localizan en el duramen del tallo y en la flor, órgano en el que se han identificado además sus derivados glucosídicos.

Se han detectado esteroles en varias partes de la planta. El espinasterol se encuentra en la flor, corteza y duramen del tallo, y su glucósido en las hojas y corteza. El campesterol, estigmasterol y sitosterol en el duramen y en la raíz, en donde también se localiza el daucosterol. La corteza del tallo además los triterpenos lupenona y lupeol y el aceite de la semilla beta-amirina y el beta-citosterol.

Farmacología.

Con el extracto etanólico de las ramas se observó actividad antibiótica contra Staphylococcus aureus.

Toxicidad.

Se obtuvo una dosis letal media de 250mg/kg de peso al evaluar un extracto etanólico-acuoso de la planta en ratones administrados por la vía intraperitoneal.

En un sistema in vitro de cultivo de células de Sarcoma 180, la dosis de 125mg/kg resultó tóxica.

Comentarios.

Pithecellobium dulce es una planta originaria de América tropical, de uso muy antiguo, que validan históricamente sus porpiedades terapéuticas. Sin embargo no existen estudios farmacológicos que corroboren su efectividad.

Herbarios.

CCIRIO, CHAPA, CICY, CIESASO, CHDIRO, CIQRO, CODAGEM, EBUM, ENCB, FCME, HUMO, IZTA, MEXU UAG, UAS, ZEA.

Literatura.

Botánica. Alarcón H. 1980; Alejandre V. y cols. 1988; Cabrera E. y cols. 1992; Casas A. y cols. 1991; Centro Coordinador Indigenista de la Región del Istmo 1987; Cervantes L. 1979; De Niz D. 1989; Escalante S. 1986; Espinosa J. 1985; Flores S. 19??; García I. 1983; García J. 1984; García S. 1984; Herrera N. 1986; López R. e Hinojosa G. 1988; Maldonado B. 1987; Ortiz A. 1986; Ruíz T. 1986; Tapia F. 1985; Zimbrón A. y Feingolo M. 1988; Zizumbo D. y García P. 1982.

Ecología. Alejandre V. y cols. 1987; Cabrera E. y cols. 1992; Centro de Investigaciones de Quintana Roo, 1991; Cervantes L. 1979; De Niz D. 1989; Espinosa J. 1985; García I. 1983; García. 1984; Herrera N. 1986; Index Kewensis; López R.e Hinojosa A. 1988; Ortiz A. 1986; Ruíz T. 1986; Soto J. 1987; Zizumbo D. op. cit.

Etnobotánica. Alarcón H. 1980; Alejandre V. y cols. 1988; Centro Coordinador Indigenista de la Región del Istmo 1987; Cervantes L. 1979; De Niz D. 1989a; De Niz D. 1989b; Escalante S. 1986; Encarnación R. y cols. 1987; Espinosa J. 1985; Esquivel G. 1982; García 1. 1983; García I. 1984; Gómez L. y Chong 1. 1985; Herrera N. 1986; Lira R. 1988; López R. e Hinojosa A. 1988; Ortíz A. 1986; Ruíz T. 1986; Soto J. 1987; Tapia F. 1985; Torres J. 1984; Zimbrón A. y Feingold M. 1988; Zizumbo D. y García P. 1982.

Antropología. Tapia F. 1978

Historia. Hernández F. 1959 (1571-1576); Sociedad Mexicana de Historia Natural. Primera Serie Vol. IV 1879; Martínez M. 1969 (1934); Sociedad Farmacéutica de México. 1952.

Química. Banerjee A, 1988; Misra G. 1977; Zapeochinaya G. G. 1980,

Farmacología. Aynechchi Y. y cols. 1982; Banerjee A. y Jain M, 1988; Banerji R. y cols. 1979; Bhakuni D. y cols. 1971; Encarnación R. y Keer S. 1991; Kamboj V. y cols. 1977.

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